No hace demasiado tiempo tratamos el tema de la ira. Comentamos que es un sentimiento realmente devastador. Otra acción humana que también provoca amargos sinsabores es el de la traición.
Concebida como el acto de violar la fidelidad hacia algo o alguien, no cuenta con una gran reputación pese a ser ampliamente cultivada. En sus filas encontramos políticos, presuntas amistades, novios y novias,... y no suele entender ni de religión, ni raza, ni género, ni orientación sexual.
La palabra en sí significaba originalmente en latín 'acción de entregar o transmitir'. Es un sustantivo que deriva del verbo tradere, que a su vez está compuesto por trans- ('más allá de' : transmisión, transoceánico, transporte, etc.) y el verb dare ('dar'). Por tanto, el significado es similar al de "dar a otro lado". Se justifica porque el traidor es el que se entrega al bando contrario.
Curiosamente, traditio también dio lugar a tradición, ya que aquí la palabra se especializa en el "conocimiento o costumbre que se transmite generacionalmente"; es como una entrega intergeneracional.
En inglés se conoce la traición como betray. También tiene su origen en el francés antiguo traine, con el mismo significado que en español (aunque en francés actual sea trahir). El traidor también se conoce en inglés como traitor.
Llorenç Garcia
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